martes, 22 de noviembre de 2011

Ya no espero a que pase la tormenta, aprendí a bailar bajo la lluvia ♥.

Acostumbrada a éste sentimiento. A esperar un cambio radical en mi vida, cuando sin embargo veo los días pasar, uno tras otro, iguales. He aprendido que la vida no va a cambiar si tu no te levantas y le das un fuerte empujón, con la cabeza alta, y una gran sonrisa. Sea lo que sea que sientas por dentro.
A veces me siento tan grande, tan fuerte, indestructible, con ganas de comerme el mundo, pero muchas otras me siento minúscula, pequeña, frágil, vulnerable, no existo. Y, realmente, para mucha gente no existo.
Aprendí que quién no te busca no te extraña, y quién no te extraña, no te quiere. Que el destino determina quién entra en tu vida, pero tu decides quien se queda. Que la verdad duele una sola vez, y la mentira cada vez que nos acordamos. Hay tres cosas que se van y no regresan jamás: las palabras, el tiempo y las oportunidades. Por eso, valora a quien te valora, y no trates como prioridad a quien te trata como opción.

3 comentarios:

  1. te sigo pro que me encanta como escribes! Es precioso

    ResponderEliminar
  2. !Muchas gracias! yo también te sigo a ti (L)

    ResponderEliminar
  3. me encanta como expresas tus sentimientos! tu entradas hace que me pueda transmitir contigo, són perfectas

    ResponderEliminar